Hola a tod@s.
Ya puedo contar con los dedos de las manos los días que faltan para comenzar de nuevo a sufrir y digo sufrir porque eso es lo que realmente quiero. Sufrir para tener al final de dos duros meses una recompensa en cuanto tiempo. Como muchos de ustedes sabéis a través de mis crónicas en septiembre pienso hacerme la tercera media maratón de este año y me gustaría esta vez, bajar de la hora y cincuenta minutos. Para ello entrenaré cuatro días a las semanas, añadiré de nuevo las famosas series o entrenamientos de calidad y a finales de cada semana haré un rodaje largo, mínimo de una hora al poder ser. Ahora con lo que diré muchos me tacharan de loco o desequilibrado pero es una verdad como una casa. Yo cuando digo sufrir disfruto y vivos los entrenamientos con mayor intensidad. Hasta ahora en estas semanas solo he ido a rodar tres días, sin series, sin tiradas largas y no sé, al final es como si me faltara algo. Eso sí, hasta ahora no he tenido ninguna dolencia o lesión. Si Dios quiere empezare el plan de entrenamientos a primeros de julio y la verdad que no veo ya la hora. Ahora les cuento resumidamente lo que ha dado de sí esta semana en cuanto a entrenos se refiere.

Los entrenos de la semana han sido estos:

LUNES DÍA 21: por la tarde 50” suave (05:30/Km – Med. FC: 162) + estiramientos

MIERCOLES DÍA 23: por la mañana 59” suave (05:37/Km – Med. FC: 162) + estiramientos

JUEVES DÍA 24: por la tarde 45” fartlek en pista de atletismo (05:14/Km – Med. FC: 159) + estiramientos

Sumados los tres días de entrenos dan un total de 28 kilómetros. Pronto añadiéndole un día más a los entrenos esta cifra la veré incrementada. Por cierto, se me olvidaba, a este plan de entrenamiento añadiré también un poco de bicicleta y gimnasio, la piscina de momento no porque la verdad que las ganas son más bien pocas y eso que ya las temperaturas invitan a darse un chapuzón, jejeje. Espero que tengan un buen fin de semana y para aquellos que tengan competiciones, que les salga una magnifica carrera. Un fuerte abrazo compañe@s.

Alexander Pérez sudando un poco por la finca de Los Bebederos